lunes, 20 de junio de 2011

Reflexiones sobre el 15M después del 19J





Detrás de tanto número y letra se esconde algo realmente grande, algo que ayer quedó patente tras las numerosas marchas que se realizaron por todo el país, y no es sólo lo que salió por los diferentes medios que, esta vez sí, contaron lo que ocurrió de verdad (o al menos una parte). No es sólo que decenas de miles de personas se movilizaron, de forma pacífica y civilizada, para demostrar que están más que hartos de cómo se gestiona nuestro país. Y no es sólo que se demostró de forma patente que el movimiento 15M sigue más vivo que nunca. Lo que quedó ayer demostrado, y lo digo habiéndolo vivido desde dentro juntos a muchos otros, es que según pasaban las marchas por las calles, la gente desde sus casas o aquellos que miraban desde las aceras nos aplaudían y vitoreaban, demostrando que ellos también están hartos de la situación. El movimiento tiene un apoyo casi total de la sociedad, y muchos no han dado el salto a acercarse a las asambleas porque la imagen que se ha dado hasta ahora es que el movimiento 15M no deja de ser un grupo de hippies que se juntan para quejarse y patalear, y nada más lejos de la realidad. El apoyo social queda claro cuando mucha gente se te acerca y te asegura que nos votaría si se formara un partido político del movimiento 15M. Lógicamente si se acercaran a las asambleas y vieran el espíritu que en ellas se respira entenderían rápidamente que no es ese el camino.

La jornada de ayer fue un éxito rotundo que da más fuerza si cabe a lo que estamos haciendo, pero es necesario seguir reflexionando para ver hacia dónde se deben orientar esas fuerzas para buscar soluciones palpables, que es lo que todos buscamos.

Que quede claro que estas reflexiones que haré a partir de ahora son propias y personales, no representan de ningún modo el pensamiento del movimiento 15M sino que buscan crear un debate necesario sobre cómo vemos lo que se está haciendo y, sobre todo, lo que queda por hacer.

Por mi parte creo que se ha dado un primer paso importantísimo para poner esto en marcha y es el de conseguir que la gente salga a la calle y demuestre que esto no puede seguir así, pero hay que tener en cuenta varias cosas respecto a esto. Hay que tener claro que estamos en un sistema democrático todavía muy joven, y sin embargo algunos de nosotros ya hemos nacido con él y, la verdad, nos hemos acomodado. A lo que voy es a que si estamos en esta situación no es culpa exclusivamente de aquellos que han decido utilizar el poder político para su propio beneficio, sino que todos nosotros también tenemos parte de culpa. Vivir en sistema democrático real requiere algo más que echar una papeleta en una urna cada 4 años y listo. Tenemos que asumir que nosotros también tenemos que cumplir con unas responsabilidades para que el sistema funcione. Y daos cuenta de que siempre estoy hablando de hacer funcionar este sistema en el que estamos, porque no creo que el movimiento 15M sea o deba ser un movimiento antisistema. Creo que es un movimiento de ciudadanos, indignados con el mal funcionamiento del sistema en el que vivimos, que busca soluciones para que dicho sistema funcione correctamente. Por eso creo que uno de los principales objetivos que debe perseguir el 15M es el de recordar a todos los ciudadanos que los políticos no son poderosos que están por encima nuestro, sino que son trabajadores públicos a nuestro servicio. Por supuesto el segundo paso es hacer ver esto mismo a esos políticos que han decidido que esto es un paraíso del enriquecimiento personal; que se les ha acabado el chollo. Que la gente ha dicho basta ya y no lo va a tolerar más.

Por tanto está muy bien salir a la calle a protestar pero siendo conscientes de nuestras propias responsabilidades, en las que incluyo estar informado de lo que se hace en nuestro nombre y ser activos a la hora de demostrar nuestra disconformidad con aquellas medidas que consideremos erróneas, porque eso es una verdadera democracia. Los políticos deben ejecutar la voluntad del pueblo, no la suya propia.


En el momento en que nos encontramos, en el que el sistema está totalmente viciado después de años en los que la gente se ha dejado hacer, uno de los pasos básicos creo que debería ser el de abrir una línea de diálogo fluido y regular entre las asambleas y cada uno de los ayuntamientos (es decir, de nuestros empleados) para que nos reporten qué es lo que están haciendo y qué es lo que pretenden hacer. Mi propuesta es que, una vez por semana, una comisión de la asamblea, (que, recordemos, representa a los ciudadanos como tal, no como personajes políticos) se reúna con un delegado del ayuntamiento que reporte las diferentes acciones que se han tomado y las que se pretenden tomar. Dicha comisión lleva ese reporte a las asamblea y la asamblea hace llegar sus impresiones a través de esa comisión al ayuntamiento. De esa forma se crea un diálogo real entre la ciudadanía y sus representantes. Tampoco creo que esto sea algo que deba existir siempre, pero sí creo que ahora es necesario para erradicar el vicio que se ha generado después de estos años de pasotismo por parte de unos y mamoneo por parte de otros.

Con ésta y otras muchas medidas creo que demostraríamos a los políticos de hoy en día que la ciudadanía ha despertado y que ya no les va a valer lo de ponernos fútbol a todas horas para tenernos entretenidos o tratar de marearnos con noticias escandalosas sin importancia. La gente se ha cansado de ser siempre los mismos los que pagamos el pato mientras otros se lo siguen llevando crudo. Como veis defiendo que siga existiendo una clase política, con la diferencia de que tiene que representarnos. Por eso creo que el movimiento 15M no debe entrar en política. No porque no queramos asumir responsabilidades, sino porque el papel del movimiento es el de dar voz a la ciudadanía como tal, para controlar que lo que se haga en esa clase política sea lo correcto.


Como digo todo esto no es más que una reflexión personal que busca ante todo generar debate, provocar que la gente piense por sí misma y se cree sus propias opiniones, porque así es como debe funcionar una sociedad adulta y democrática. Discutidme, proponed nuevas ideas, llevémoslas juntos a las asambleas y sigamos debatiendo y, por encima de todo, pensad.

4 comentarios:

  1. Estoy completamente de acuerdo contigo, Obiwan. La emoción que me embarga cada vez que uno participa o ve imágenes no tiene parangón. Al igual que tú, yo he nacido en democracia y como tal, deseo una democracia completa y efectiva, en la que se escuche a la gente, en la que la separación de poderes sea respetada, en la que todos tengamos representación en la medida en que deseemos tenerla. A menudo me da la sensación de que la transición ha llegado hasta hace bien poco, cuando los nacidos en democracia se hicieron conscientes y adultos y dijeron "hasta aquí hemos llegado". No puede seguir esta cadena de desprópositos. Entre todos podemos conseguir un mundo mejor. Sólo hace falta voluntad de hacerlo.
    Un abrazo

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  2. Totalmente de acuerdo Silvia, yo creo que estamos en una segunda fase de la transición hacia una verdadera democracia.

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  3. Gracias por tus reflexiones. Estoy de acuerdo contigo en que veo más al 15M como una voz de la ciudadanía que como un partido político. Aunque el futuro es incierto y no es fácil vislumbrar qué opciones pueden ser más aconsejables. En cuanto a lo del sistema, me parece algo más complejo. Son ya muchos autores (economistas, científicos, sociólogos...)los que cuestionan la validez del sistema (metabolismo) socio-económico que nos ha llevado a donde estamos, a través del consumismo despilfarrador y profundamente insolidario. No por tener más y más somos más felices o estamos en paz (ver por ejemplo el Índice del Planeta Feliz). Tenemos pero no somos. Ya nos lo ha dicho José Luis Sampedro: diez en técnica y cero en humanidad. Estoy convencido que no es sólo cuestión de mejorar la democracia sino de interiorizar cambios culturales. El 15M puede ser un movimiento que aliente el pensamiento y la formación de todos los ciudadanos para que tengamos una perspectiva planetaria: incluyamos a todos los seres humanos y al conjunto del medio natural del que procedemos. Seamos conscientes de las implicaciones de nuestros actos.Sigamos todos y todas adelante con ilusión, paciencia y respeto. Un saludo

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  4. Estoy de acuerdo, pero el problema es que a algunos políticos se les ha olvidado lo de gobernar para el pueblo no para sus propios intereses.. Yo considero que lo primero de todo es cambiar la ley electoral para que un voto valga lo mismo que otro..

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