lunes, 12 de abril de 2010

Dos no pelean si uno no quiere 2ª parte

Esta vez es un perro el que es puesto a prueba y, desgraciadamente, no parece tener la misma paciencia que el de la 1ª parte a la que hace referencia el título de esta entradas. Si es que casi se pueden oir los pensamientos del perro diciendo "Pero, ¿por qué no me dejas en paz? ¿Te he hecho yo algo?"

2 comentarios:

  1. ¡Uf! No siempre tenemos la misma disposición.
    Saludos.

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  2. jejeje, es que los gatos son como las personas, no sabemos resistir a la tentación y nos puede

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